El desarrollo de energías renovables a partir de desechos agrícolas y forestales, son iniciativas que se están dando a nivel mundial de un modo más común de lo que uno cree.
En esta ocasión, en España, la Comunidad Valenciana desarrolla energía renovable aprovechando desechos agrícolas y forestales; en específico la Cooperativa Eléctrica San Francisco de Asís, dueña de la Corporación Valenciana de Energías Renovables.
Estos, han inaugurado una nueva planta de biomasa en Alicante, para desarrollar este tipo de energía, destinada a la producción de briquetas y siendo a su vez, una de las más importantes de este rubro en Europa.
La nueva planta de Crevillante (Alicante), es por estos días la única fábrica que produce bloques sólidos de combustibles (briquetas) con cáscaras de almendras y se espera que las emisiones de CO2, se reduzcan en 50 millones.
Otros datos importantes a señalar en cuanto a la producción de la planta, es que su producción anual se estima en 32 mil briquetas. Con esta cifra, el consumo de energía térmica y eléctrica para los hogares, alcanzaría a los 20 mil. En tanto, 15 mil toneladas de derivados de petróleo de evitarán anualmente.