Un grupo de arquitectos construyeron la Casa Iseami en una región aislada de la Península de Osa en Costa Rica, que es autosuficiente en términos de agua y energía.
Cargada con tecnología respetuosa del medio ambiente, la casa se encuentra a un metro por encima de la superficie para que se mantenga alejada de la humedad, e incorpora varios sistemas de ahorro de energía para reducir la carga en sus generadores de energía.
La casa utiliza el agua de la selva, que también se usa como fuente de energía para dos turbinas hidroeléctricas de bajo impacto que generan 800KWh de electricidad. Además, 10.800 KWh de electricidad son proporcionados por una amplia terraza solar, que ha sido diseñada con el fin de tener la orientación y la posición para maximizar la generación de electricidad.
Todos los materiales utilizados en su construcción han sido probados para evaluar su comportamiento en el difícil entorno de la zona, que es muy húmedo. La estructura ha sido diseñada para maximizar el uso de la ventilación natural y la iluminación para reducir la necesidad de medios artificiales.