Los bosques de montaña, cumplen diversas funciones para una mejor salud de nuestro planeta. Es por esto, que debiesen existir políticas claras por parte de los gobiernos en su conservación y cuidado.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU), decretó 2011 como “el año internacional de los bosques”, incluyendo los bosques de montaña.
Pero no sólo estos bosques son parte patrimonial, sino que representan y tienen funciones importantes dentro de lo que biodiversidad se refiere.
Estos bosques captan y mantienen la calidad del agua, además de regular el caudal de ríos, reduciendo la erosión y sedimentación en la parte baja de estos.
En términos turísticos, los bosques de montaña, son importantes por su paisaje, la interacción de las personas con la naturaleza.
Absorben grandes cantidades de agua proveniente de la lluvia, recogiendo y almacenando estas aguas, como una especie de “esponja”. En este caso, los suelos forestales absorben más agua lluvia que suelos cubiertos por pasto.
Absorben gases de efecto invernadero de la atmósfera, siendo un pilar importante dentro de lo que se considere como salud ecológica mundial; además de absorber gran cantidad de carbono.
Así que, ya sabe la importancia de los bosques de montaña, y el papel que estos juegan silenciosamente en el bienestar y la salud de nuestro planeta. Los gobiernos no deberían dejar de lado el cuidado de estos e incluir dentro de sus políticas, la conservación de los bosques de montaña.